1. La situación actual.
En la actualidad las instituciones que
tradicionalmente se han encargado de la educación, deben replantearse el papel
que desempeñan en el hecho educativo debido al cambio aceleradosufrido
por la sociedad y que se concreta, entre otros, en los siguientes aspectos:
La familia
Aparecen nuevas formas familiares:
presencia de mujeres solas con hijos, familias separadas o reconstituidas,
monoparentales, desestructuradas o con riesgo de exclusión por razones
sociales, económicas, culturales... En genera tiende a delegar su
labor educadora en la escuela y se dan situaciones compartidas entre
ambas asumiendo esta última ( la escuela), cada vez más, algunas tareas que ya
no son exclusivas del ámbito familiar como la comida, el descanso, etc
La sociedad.
La socialización como elemento
de desarrollo interpersonal sigue siendo el principal motivo de subsistencia de
las escuela. Los cambios en este sector son: escala de
valores, tiempo y disponibilidad para el ocio, concepción de la cultura,
existencia de barrios y ciudades devaluados por el urbanismo especulativo para
ser espacios de encuentro para el ocio gratuito o la colaboración social, etc.
Uno de los elementos que más
caracteriza a la etapa actual es la venida a menos de los servicios
públicos en su conjunto y de la educación en particular en tanto que
considerada como unservicio público para la construcción colectiva
de una sociedad democrática y solidaria que, en coordinación con otros aportes
sociales( sanidad, seguridad social....) mantuvieron o desarrollaron el llamado
estado de bienestar.
Una nueva organización del
trabajo en la que habrá más población desocupada en las actividades
tradicionales con la consiguiente necesidad de reacomodo educativo. Además se
acentúan fenómenos como el de la inmigración que plantea situaciones novedosas.
La escuela.
Cambios en las funciones de
los educadores que deben establecer relaciones estrechas no solo con
el alumnado sino también con las familias, con los organismos que se ocupan
de favorecer la convivencia, con el tejido asociativo próximo, etc. La
escuela comparte sus funciones educativas con otros
agentes (iniciativas de animación cultural, de gestión del ocio...)
Las crecientes aportaciones de
la ciencia y el mayor alcance de los medios de divulgación de la misma
hacen que los saberes sean cada vez más variables. La escuela mantiene la
función de atender las demandas que la sociedad fija en los
programas oficiales, muchas veces sujetos a criterios de oportunismo partidario
( tabaquismo, días de...) y sin profundizar en la cultura del aprendizaje
democrático, científico y solidario. La falta de consenso para delimitar con la
flexibilidad que requiere una época tan cambiante el acervo cultural deseable
para el ciudadano que se acerca a la edad adulta.
Junto a la escuela y con diferencias
dependientes de la zona, clase social, etc, actúa, de forma paralela a los
programas oficiales, una variada oferta de diverso origen
sociopolítico, organizativo o estrictamente mercantil que configura
la llamada educación no formal.
Nuevas tecnologías.
Las posibilidades de las mismas pueden
configurar una red complementaria y en casos casi alternativa a la
escuela convencional. Los avances tecnológicos posibilitan redes de
comunicaciónque en algún caso se ha dicho que está configurando un nuevo
tipo de persona y que demandan una atención específica.
El uso de información audiovisual y escrita
en un mundo controlado por grupos económicos e ideológicos, con frecuencia
tendenciosos, condicionan cada día más los propios fines de la educación.
2. Aproximación a una definición de
entorno.
La concepción de las relaciones entre
educación formal y entorno son variadas y pueden ir desde la concepción de la
escuela transmisiva que lo considera como influencia perturbadora y lo ideal
sería su no existencia, hasta la apuesta por una imbricación crítica
y mutuamente enriquecedora. En cuanto a las actividades, el entorno puede ser
considerado como objeto de estudio, o sea como recurso didáctico, o
enfocado como contexto vital y de aprendizaje del niño o niña e intentando
relacionar y armonizar lo que se aprende dentro y fuera de la escuela.
El entorno material,
aquello que rodea a la escuela o al alumnado, presenta el problema
de la definición de sus límites ¿hasta dónde puede hablarse del
entorno?. Tampoco el entorno puede reducirse al aspecto solamente material sino
que también debemos contemplar el entorno sociocultural: una serie
de valores, costumbres y realidades culturales en los que estamos
inmersos.
En la actualidad existe una
interacción entre factores locales y globales teniendo estos últimos
mayor poder para configurar la realidad, tanto del entorno material como del
cultural. Los medios de comunicación posibilitan que lo lejano entre en nuestra
casa, facilitándonos una percepción del mismo superior a lo que
sucede en nuestro entorno más inmediato. Como consecuencia de ello,
debemos distinguir entre entorno objetivo, respecto al
cual podemos hablar de lejanía o cercanía en el espacio, y entorno
subjetivo, las realidades materiales y culturales ( que no tienen por qué
coincidir con lo más próximo físicamente) reconocidas como cercanas vitalmente
por las personas y que, por tanto, establecen su identidad, sus intereses y, en
parte, sus acciones.
El entorno sociocultural ha
de entenderse no solo como objeto de estudio y como recurso pedagógico sino
como contexto social en el que vive, aprende, se desarrolla vitalmente cada
persona y está constituido por personas (alumnado, familias, vecinos...) con
conocimientos, valores, vivencias, etc, es decir, no son sólo habitantes sino
elementos activos y con valor propio.
El entorno es también un espacio
de conflicto ( sin connotación necesariamente negativa) : existen una
serie de problemas, de visiones e intereses contrapuestos, etc. En este sentido
los diferentes colectivos deben ser también un elemento de conexión entre la
escuela y el exterior. El trabajo educativo desde esta perspectiva no es fácil
pero el no abordarlo supone limitar las posibilidades y necesidades de la
educación.
Una nueva faceta en la consideración
del entorno viene dada por el llamado entorno virtual; lo real y lo
virtual se ínterpenetran y amplían la experiencia y la construcción de la
subjetividad y llegando, en opinión de algunos autores, a ser caracterizado
este tercer entorno como “ espacio social” en el que no solo
se produce intercambio de información sino también acciones. En los espacios
virtuales las personas se comunican pero también interactúan, se sienten
integrantes de diversas comunidades, etc.
Internet no es solamente un medio de información sino que está
caracterizado por su ambivalencia y debemos estar en guardia frente a su
utilización perversa por los detentadores del poder. El entorno virtual afecta
directa o indirectamente a toda la población y es un lugar de actividad para
una parte de ella, además las TIC facilitan el acceso a la
información, la interactividad, el trabajo colaborativo y la comunicación a
distancia, todo ello de gran interés educativo.
Es muy importante la conexión entre el
entorno real y el virtual pues el segundo amplía las posibilidades del primero
y el real imposibilita que las actividades en el entorno virtual se desliguen
del resto de la realidad social. Además el aprendizaje con utilización de las
TIC fomenta las intenciones críticas a través de la posibilidad de entrar en
contacto con movimientos sociales de otras zonas, relacionarse con otros
grupos, etc.
3. Principios que deben guiarnos.
La escuela debe estar abierta a
la comunidad, es preciso superar la concepción tradicional de la escuela
integrando a otros agentes educativos y coordinándola con sectores
como alumnado, familias, profesorado, otros profesionales, voluntariado,
agentes sociales... Las actividades de aprendizaje deben formar
parte de las actividades sociales del alumnado y del entorno; esta necesidad
viene dada al considerar a la escuela como un elemento dinámico en interacción
con la realidad social y a esta como un conjunto de personas, de grupos y
asociaciones que son agentes activos. Colectiva y/o individualmente, todos
ellos poseen un conjunto de conocimientos de diferentes tipos que la escuela
suele ignorar porque parte del prejuicio que supone la concepción de que solo
la escuela puede educar.
La educación no acaba en el ámbito de
las instalaciones escolares ni en el horario lectivo: la familia, el barrio, la
ciudad, además de recursos educativos deben aportar las circunstancias
materiales y humanas en los que se basen los modelos pedagógicos innovadores y
transformadores que oferten a la comunidad educativa programas contextualizados
y consensuados que den respuesta a las necesidades, carencias y expectativas
del grupo social al que van destinados y en cuya elaboración hayan participado
los agentes educativos pertenecientes a los ámbitos familiar, escolar y social.
La única vía para educar es mantener al
niño/a en contacto permanente con la vida, para lo cual la propia
escuela debe ser catalizadora del entorno para que este entre en el
aula.
Los proyectos y la organización
del centro educativo deben estar en función de las necesidades de aprendizaje
de su alumnado y en relación con el entorno social para potenciarse mutuamente.
El proyecto educativo de cada centro debe estar incluido en los proyectos más
globales del barrio, ciudad, etc, asumiendo en ellos cada agente y cada entidad
su propia función educativa.
El centro escolar deberá gozar de la autonomía suficiente
para adecuar su proyecto y llevarlo a término y todos los
servicios públicos que incidan en el ámbito educativo deben estar coordinados
para delimitar sus campos de competencia específica, evitar duplicidad de
servicios, detectar lagunas de actuación, necesidades y planificar objetivos;
esta coordinación entre escuela y entorno es imprescindible cuando la cultura
escolar y del entorno no son coincidentes.
No solo se aprende en la escuela sino
también en las interacciones con el entorno y para que se produzca éxito
escolar es necesario que todas estas interacciones vayan en la misma dirección.
La escuela no puede ser diseñada solamente por el profesorado sino que tiene
que participar realmente toda la comunidad.
Es necesario abordar la programación
educativa procurando que vivencia y reflexión, conocimiento y acción, no se
aborden por separado: a través de proyectos de trabajo que comprendan los
diferentes niveles y ámbitos de forma integrada.
La educación como compromiso de toda la
sociedad necesita que cada vez se avance más en proyectos y programas que se
preocupen de instruir y formar a toda la ciudadanía y que, a la vez, puedan ser
aprovechados desde los centros escolares.
El entorno social ( medios,
instituciones, organismos...) debe ser consciente de que, con frecuencia,
genera actitudes de violencia, racismo, consumismo, etc, que luego se pide a la
escuela que corrija. En estos proyectos no puede caber todo ( coherencia) y las
actuaciones prácticas de una ciudad educadora no pueden ser contradictorias con
los valores que pretende inculcar en la ciudadanía.
Es la escuela la que mejor puede
desempeñar el papel social y educativo que se le demanda a la institución
escolar pero ello requiere la asistencia de los poderes públicos de manera que
reciba los medios humanos y materiales necesarios para las iniciativas que
persiguen la integración cultural, la participación democrática, la igualdad de
oportunidades y la justicia social. Por lo tanto, la escuela no solo debe ser
lugar de instrucción académica sino también un espacio de socialización
y desarrollo cultural que actúe sobre el entorno y para ello se deben
crear las condiciones necesarias para convertir a los centros escolares en
instituciones generadoras de cultura de manera que la sociedad se implique
directamente en su proyecto.
La participación es un
valor fundamental en la sociedad actual y su aprendizaje debe ser fomentado en
el centro escolar llevando a cabo proyectos de participación que superen el
marco estricto de la comunidad escolar.
Una comunidad educativa democrática
debe implicar al conjunto de sus integrantes en las decisiones más importantes;
la confrontación de opiniones, la discrepancia razonada y el respecto a la
diferencia suponen un proceso de aprendizaje y de maduración esencial para
quienes se están formando.
Un aprendizaje transformador debe
conectar con la realidad del entorno pero al hacerlo debemos evitar el optar
solamente por el entorno más próximo con el riesgo de asumir una visión
limitada de la realidad, si optamos únicamente por el más global corremos el
peligro de aumentar el nivel de abstracción y disminuir
las posibilidades de intervención; de todos modos en la realidad actual, lo
local y lo global están profundamente interrelacionados y el estudio de las
relaciones y conexiones entre los diferentes entornos permite enriquecer la
comprensión y la actuación.
Uno de los enfoques del aprendizaje que
se propugna desde diversos grupos para la superación del fracaso
escolar por parte de los sectores más desfavorecidos es el llamado aprendizaje
dialógico. Parte de la base de que las capacidades de selección y
procesamiento de la información se desarrollan mejor en un diálogo que genera
reflexión. Todas las personas que interactúan con alumnas y alumnos, incluidos
sus compañeros/as, influyen en su aprendizaje y tienen capacidad para optimizar
esa influencia. Una de las formas de concretarlo en el aula es con grupos
interactivos. El aprendizaje dialógico puede sintetizarse en siete principios:
Diálogo igualitario. Se valoran las diferentes aportaciones en función de sus argumentos y
no desde posiciones de poder de quien las realiza.
Inteligencia cultural. Cada cultura posee distintos códigos y canales de comunicación.
Transformación. La enseñanza no solo debe adaptarse al contexto cultural sino
transformarlo.
Dimensión instrumental. La comunidad educativa debe percibir el diálogo como un instrumento
que, entre otras cosas, sirve para realizar aprendizajes que les posibilitan
salir de la exclusión social.
Creación de sentido. Saber que podemos dar sentido a nuestra existencia y este sentido
surge cuando la interacción entre las personas es dirigida por ellas mismas.
Solidaridad. Cada niño o niña de un grupo interactivo considera un objetivo propio
el éxito en el aprendizaje de todo su grupo. La solidaridad se construye desde
la base y se extiende al conjunto de la sociedad.
Igualdad de diferencias. Perseguir una verdadera igualdad que incluye el derecho de toda
persona a vivir de forma diferente pero, al mismo tiempo, teniendo las mismas
oportunidades de elección y realización.
Debemos tener en cuenta varios aspectos
fundamentales cuando hablamos de escuela y entorno:
* La superación de las desigualdades
con especial atención a las minorías étnicas, a los inmigrantes y a las
situaciones de exclusión y marginación. La educación intercultural será real en
la medida en que se potencie la participación de personas de las distintas
culturas a través de un diálogo igualitario.
* Abordar los cambios sociales(
familias, vida laboral, etc) y crear un clima de altas expectativas para el
alumnado, profesorado, familias y comunidad. Es necesario superar los
planteamientos compensatorios pasando a posturas enriquecedoras tanto del
currículo escolar como del entorno. Hay que hacer planteamientos de máximos en
lugar de mínimos y poner todos los medios para alcanzarlos.
* La escuela es un agente dinamizador y
transformador del entorno para enriquecerlo.
* El aprendizaje es el centro de la
participación, de la colaboración, del diálogo. Todo lo que se plantee debe
servir para mejorar el aprendizaje. Debe propiciarse un entorno estimulante del
aprendizaje tanto en el aula como fuera del centro con actividades variadas y
enriquecedoras.
4. Propuestas de actuación.
1.- Planes
institucionales de apoyo a las familias, de conciliación de la vida
familiar y laboral. Revisión de los vigentes planteamientos educativos y
asistenciales.
2.-
Impulsar políticas sociales y laborales que favorezcan los
tiempos de atención a los niños/as en la familia y por impulsar el
debate en torno a la responsabilidad familiar de atención al niño teniendo
siempre presente el hecho de que la escuela no suple a la familia.
3.-
Normativa de homologación de empresas con servicios de
ludoteca y otras ocupaciones del ocio.
4.-
Las administraciones públicas deben asumir la obligación de garantizar los
recursos a todos los centros, especialmente a los de contextos
sociales más necesitados, dentro de una concepción del centro escolar como espacio
de socialización y desarrollo cultural.
5.- Los
ayuntamientos, como administración más cercana a los ciudadanos/as, debe
posibilitar que las instituciones y asociaciones del municipio participen en la
oferta educativa compensatoria luego de un análisis de la situación real y
teniendo en cuenta las desigualdades de partida. En su tarea de colaboración
con la educación pública debe promover iniciativas que favorezcan el desarrollo
integral del alumnado, compensando en todo lo posible las carencias
socioeconómicas de los ciudadanos/as y atendiendo a la idea de que la calidad
en educación debe traducirse en ofrecer el máximo de posibilidades a todos los
estudiantes.
6.- Actuaciones
concretas a realizar por los ayuntamientos:
Mantenimiento y actualización de los
edificios.
Actuaciones en el aula y horario
escolar a través de programas que desarrollen las líneas transversales del
currículo: educación para la salud, educación Vial, educación Sexual,
coeducación, educación en la solidaridad...
Actividades relacionadas con la vida
cultural del municipio( visitas, conciertos, escuelas municipales...)
Colaboración en las actividades
extraescolares proporcionando personal y material adecuado( actividades
deportivas, culturales-creativas, biblioteca de barrio, escuela de padres y
madres, charlas...)
Implicación en la gestión del sistema
escolar ( consejo escolar municipal)
7.- Superar la separación entre el
proyecto educativo y el proyecto curricular buscando
cauces para que la participación de la
comunidad también abarque aspectos curriculares a los que el conjunto de la
comunidad dé más importancia.
8.-
Modificación de competencias de los consejos escolares para
que sean órganos de participación real y no órganos formalistas y burocráticos
con una representatividad demasiado sectorializada y poco adecuada a la
realidad actual.
9.-
Necesidad de reconstruir el tejido social desde la calle, entendiéndolo como la
única lógica frente a la tendencia cada vez más degradante a la
incomunicación, la soledad, la exclusión, la deshumanización...
10.-
Facilitar el diálogo sosegado en la comunidad educativa en
sentido amplio y en la sociedad en su conjunto con la participación e información
rigurosa, más allá de oportunismos.
11.-
Colaboración en el aula o centro de manera que adultos de
diferentes culturas, edades, profesiones...colaboren en las tareas educativas
además de servirles para su formación ( así también se colabora en la
transformación del entorno)
12.-
Colaboración de familias y demás agentes sociales de forma
coordinada con el profesorado.
13.-
Coordinación entre las distintas administraciones ( local, diputaciones,
educativas, bienestar social...) para asegurar una oferta equiparable en el
terreno de la educación para el ocio.
14.-
Solicitar y promover situaciones que acrecienten la cultura colaborativa en el
profesorado, tanto para los aprendizajes integrados en el propio centro como en
las entidades y grupos ciudadanos de la comunidad.
15.-
Ampliar el horario de aprendizaje organizando bibliotecas
tutorizadas donde pueda haber profesorado, familiares y voluntariado, los
comedores se transformen en comedores educativos, se abran las puertas del
centro más temprano por la mañana, etc.
16.- Apertura
del centro a la comunidad que implica:
El centro se convierta en foco cultural
para la comunidad.
Tener en cuenta el entorno en todas sus
facetas como objeto de estudio favoreciendo una visión crítica del mismo,
facilitando su conocimiento y aumentando su capacidad para transformarlo.
Colaborar con los colectivos que
existan en la comunidad.
Constitución de comisiones mixtas
escuela-sociedad.
Concretar proyectos, recursos,
condiciones, para poder realizar esta apertura.
17.- Atender a la formación del
profesorado con la coherencia exigible en todos los tramos de la
educación y con la consideración técnica para la concreción del currículo
acorde con circunstancias tan variadas y cambiantes.
18.-
Integrar en la escuela las nuevas tecnologías con la dotación
de las mismas y la formación del profesorado adecuado a los objetivos de una
nueva concepción de la alfabetización.